Los faros de un vehículo proporcionan seguridad en la oscuridad y cuando llueve. Con el paso de los años se pueden volver opacos. El granizo u otros impactos físicos pueden rayar la superficie lisa de los faros. En este artículo conocerá cuándo conviene reparar su faro principal y qué pasos se deben seguir.
¿Cuándo debería considerar una reparación de los faros?
Todo propietario de un vehículo sabe tras muchos años de experiencia que los faros delanteros de un coche pierden potencia con el paso del tiempo. No siempre se han de cambiar los medios lumínicos para restablecer el funcionamiento perfecto. Si el faro está opaco ya no emite la luz suficiente. Una simple limpieza no basta para solucionar este problema.
Por tanto, debería tomarse rasguños y superficies muy opacas en su faro muy en serio. Por un lado se reduce su seguridad en trayectos nocturnos y cuando llueve porque el haz luminoso de su daro ya no es capaz de iluminar la calle como es debido. Por otro lado perjudican grietas y rasguños más grandes la dispersión de la luz por lo que se puede deslumbrar a otros conductores. El propio vehículo se vuelve un peligro en carretera que no se puede eliminar cambiando simplemente los medio luminosos.
Cuando perciba que la potencia luminosa de sus faros ya no brilla tanto como antes, debería considerar arreglarlos. Un indicio es además que los vehículos que vienen de frente le indicarán con el avisador luminoso un deslumbramiento. Ello pensarán que tiene la luz de carretera encendido aunque las luces de cruce tan solo dispersan la luz desfavorablemente por los rasguños. En ambos casos no se tome los cambios en sus faros a la ligera.
Faros y la ITV – lo que hay que tener en cuenta
Incluso si ignora un daño en sus faros principales, como muy tarde en la próxima inspección técnica general (ITV) será un problema. Una ajuste y un funcionamiento impecable de los faros es fundamental en la inspección técnica de su vehículo. Con dispositivos de medición especiales se controla la potencia y la dispersión de la luz. Si presenta deficiencias notables es posible que no se reciba la pegatina de la inspección técnica.
Generalmente indicará el inspector técnico el recambio de los faros existentes. En función del fabricante y de la serie de construcción la reparación puede llegar a costar más de mil euros lo que usted como propietario de un vehículo querrá ahorrarse. Puliendo y preparando los faros principales mejorará la calidad de su calidad para cumplir las exigencias de la inspección técnica. Cabe destacar aquí la importancia de un ejecución precisa y profesional para mejorar realmente el estado de sus faros delanteros y no dispersar la luz aún más.
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Pulir faros opacos y rayados – una guía práctica
Si los faros de su vehículo están rayados o lechosos, ya llegado la hora de una mejora rápida y profesional. Para ello no tiene que acudir necesariamente a un taller de coches. También puede mejorar el estado de sus faros con medidas sencillas. Siga para ello las siguientes instrucciones.
1) Limpie los faros exhaustivamente
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2) Pula los faros con cuidado
No use el papel de lija seco puesto que la fina granulación podría provocar más rasguños. Es mejor que lo humedezca y lo pase a continuación varias veces por la zona afectada. Recomendamos trabajar con dos o tres papeles de granulación diferente y empezar por los más gruesos. Tras cada proceso de pulido es habitual que queden finos restos en los faros que se pueden eliminar fácilmente con agua templada. |
3) Pula a alto brillo y selle los faros
Para sellar los faros trabajados se recomendamos usar agentes especiales para plásticos que están disponibles en el comercios especializado en accesorios para automóviles. No obstante, preste atención a usar solamente productos adecuados para faros principales. Aplicando el agente sellador suavemente, se forma una capa protectora sobre el faro sin perjudicar la luminosidad del mismo. En cuanto encienda el faro e ilumine una superficie lisa y plana, verá si ha trabajado limpiamente. |
Más consejos para preparar los sus faros
– Arreglar los faros rayados es una alternativa sensata y económica. No obstante, ni siquiera el abrillantador más potente es capaz de hacer milagros en una faro altamente dañado. Por tanto, sea realista cuando arregle sus faros. Si la superficie de plástico presenta grietas grandes y claras, ya no es posible pulir los faros y se han de reemplazar. |
– Los pasos anteriormente mencionados no se han de realizar, si su faro presenta defectos claros. Por tanto, se recomienda limpiar los faros principales exhaustivamente en intervalos regulares para sacar el máximo provecho de la iluminación en todos los trayectos. Para un conductor responsables es natural preparar su vehículo para los meses de invierno y limpiar los faros a conciencia. Incluso si no presentan daños y rasguños evidentes la potencia lumínica ya puede estar perjudicada. |
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