Todo aquel que compre un coche nuevo, tendrá que hacerse esta pregunta en algún momento: ¿Prefiero cambio manual o automático? Está claro que ambos sistemas tiene sus ventajas y desventajas, no obstante, también algunos prejuicios y errores conceptuales en las cabezas de los conductores que pueden influir posiblemente en la decisión.
Situación en el mundo
En países como Japón y EE.UU el porcentaje de vehículos con cambio automático alcanza incluso el 90 %. Esto no se debe a que allí se es demasiado vago para manejar la palanca de cambio y el embrague.
Acabar con los prejuicios
Muchos conductores siguen pensando que la transmisión automática hace el coche más lento, consume más combustible y puede provocar mayores de gastos de reparación. Al menos dos de estos prejuicios han quedado completamente obsoletos en los últimos cinco años aproximadamente. Es más, los estrictas especificaciones de la normativa sobre la emisión de gases de escape solo se podrán cumplir en futuro con la transmisión automática, donde se optiman los cambios de marcha y los números de revoluciones hasta el más mínimo detalle.
La revista alemana «Auto Bild» puso diez modelos diferentes a prueba, tanto de transmisión automática como manual. El resultado: Con 6:4 en consumo de combustible y emisión de gases ganó la transmisión automática. Mediante una transmisión automática moderna es posible ahorrar hasta un 20 % del combustible.
Una cosa, sin embargo, sigue siendo cierta: aún en el año 2017 los fabricantes de automóviles pide una cantidad considerable para vehículos con cambio automático. No obstante, esto no es del todo infundado puesto que se invierte mucho tiempo en el desarrollo. En función del modelo, el cambio automático puede suponer un recargo de hasta un 5 % del precio de compra. En el caso de vehículos compactos, como el Honda Jazz, esto solo supone 1.000 euros, pero en la clase A de Mercedes más grande ya se debe pagar el doble.
Los diferentes tipo de transmisión automática
Sobre todo en los últimos diez años se ha avanzado mucho en cuanto al desarrollo de la transmisión automática, por tanto, se ha renunciado a crear un sistema automático apto para todos los vehículos a generar ahora diferentes tipos de cajas de cambio en función de su área de aplicación ( y las exigencias). Algunos de ellos son mejores para altos pares de giro, pero con un número de revoluciones menor, mientras que otros son más dinámicos, pero poco eficaces.
- En América donde los motores son tan grandes como su par de giro domina el cambio automático con convertidor de par. Su mayor ventaja es el diseño para pares de giro altos, por lo que lleva el sobrenombre «convertidor de par». Ofrece un alto confort, pero no puede convencer en cuanto a eficiencia.
- Las cajas de cambio de doble embrague usan una transmisión directa (DSG por sus siglas en alemán e inglés) que también soporta altas revoluciones y se emplea, por tanto, sobre todo en motores deportivos. Aquí también se pierde una parte de la potencia del motor, pero bastante menos que con el convertidor de par. Además, esta desventaja puede compensarse en parte con la ayuda de ordenadores.
- Continuously Variable Transmission (CVT) es el término especializado para lo que llamamos transmisión variable continua. Dispone de un margen de regulación continuo, consumo especialmente poco combustible y es relativamente eficaz. No obstante, hay una desventaja decisiva. Los ruidos del motor cambian drásticamente y no siguen a la aceleración y la velocidad, por lo que los CVTs son poco populares a pesar su sus ventajas.
Transmisiones automáticas son más propensas a averiarse y más caras de reparar
Ya desde tiempo inmemoriales se consideran los sistemas de transmisión automática muy propensos a sufrir averías cuya reparación puede ser muy costosa en el peor de los casos. Esto es cierto en gran medida y de hecho una de las mayores desventajas existentes del cambio automático. Pero solo si no se incluye el embrague perteneciente al cambio manual.
Puesto que este es uno de los costos principales de cada reparación en esta área. Quien no cambie siempre de marcha correctamente, mantenga el embrague presionado en el semáforo y trabaje con el punto de fricción en vez de usar el freno de mano, no disfrutará mucho tiempo de su embrague y tendrá que cambiarlo regularmente en el peor de los casos. Como estos defectos causados por el conductor no pueden surgir en las cajas de cambio automáticas, esta desventaja se relativiza. Además, mediante trabajos de mantenimiento regulares es posible mantener la transmisión automática en buen estado así como detectar y eliminar fallos a tiempo.
Los cambios automáticos son hoy en día generalmente «libres cambios de aceite«. Esto significa que los aceites de transmisión usados pueden permanecer durante toda la vida útil en la carcasa. Aun así es por supuesto necesario revisar el nivel de aceite regularmente, pero se puede realizar según los intervalos de mantenimiento normales. Así el mantenimiento ya tampoco tiene desventajas en realidad.
El futuro
Echando un vistazo a las tendencias resulta evidente que la transmisión manual quedará obsoleta en los próximos 20 años a más tardar, puesto que las especificaciones en cuanto al consumo de combustible y a la emisión de gases solo se pueden cumplir con cajas de cambio optimizadas.
Dicha evolución ya se percibe. Un cambio automático es, sobre todo para el tráfico urbano, un aliado perfecto, pero también en los límites puede superar la máquinas hoy en día a los humanos e incluso en el deporte de carreras aumenta el uso de vehículos con transmisión automática.
¿El cambio automático solo recomendable en el segmento premium?
Si se echa un vistazo a las listas de venta de fabricantes como Bentley, Bugatti, Ferrari, Lexus o Lamborghini, se verá que ninguno de estos modelos se ha vendido cambio manual convencional. Esto se debe a que con él apenas es posible alcanzar los cortos tiempos de conmutación deseados por los clientes. Además, las transmisiones estándar con suelen ser capaces de tratar con los altos pares de giro. Aun así se puede cambiar de marcha manualmente, si lo desea. Por lo demás se encarga el cambio automático de ello, sobre todo en los vehículos de fabricantes premium.
Para los económicos automóviles compactos cambia la cosa. La transmisión automática aquí montada que por supuesto también debe ser económica en proporción, suele ser de menor calidad y tampoco es capaz de convencer completamente. Si bien fallos totales son poco frecuentes, sobre todo los todoterrenos ligeros, como el Kia Sportage o el Hyundai Tucson optan por el convertidor de par que será algo más confortable, pero también ralentiza el vehículo.
Cambio manual versus cambio automático
– Todo sobre el tema en resumen
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Cambio automático… +… ideales para conductores principiantes +… son cómodos y eficientes +… son más avanzados técnicamente que las transmisiones manuales -… son más costosos -… disminuyen la potencia del motor |
Cambio manual… +… facilitan una conducción dinámica +… son más económicos en la compra y en la reparación -… requieren mayor atención al conducir -… apenas se puede mejorar |
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